Saltar al contenido
Detortugas.net

Tortuga Carey – Eretmochelys Imbricata

La tortuga carey también es conocida por su nombre científico que es Eretmochelys Imbricata. Están en grave peligro de extinción debido a los radicales cambios ambientales que sufren sus nidos y hábitats.

Características y descripción de la tortuga Carey

Su piel es bastante delgada y flexible. Tiene motas de color marrón. Miden entre 60 y 90 cm de largo, es mediana. Pesa entre 40 y 60 kg. El caparazón es más alargado y presenta los escudos imbricados con el borde aserrado. En su concha tiene cinco escudos vertebrales, cuatro pares de escudos laterales, un número variable (menor a diez) de escudos marginales y dos escudos supracaudales.
En su cabeza tiene dos pares de escamas prefrontales y tres pares postorbitales. Su boca es similar al pico de un ave de presa; es muy afilado. La tortuga Carey tiene las aletas delanteras más grandes de su especie y, en sus aletas posteriores tiene dos uñas por pata.
La cola del macho es más grande y sobresale del margen trasero del caparazón. Además, los machos tienen aletas más grandes que las hembras.

Alimentación de la Tortuga Carey

La dieta de estas tortugas es bastante tóxica. Esto se debe a que consumen, entre otras cosas, erizos de mar, pequeños animales, percebes, yerbas marinas, etc. Su comida preferida son las esponjas. En el caribe, por ejemplo, se alimentan exclusivamente de esponjas. Pueden comer hasta 540 kg por año de este alimento. La capacidad para absorber toxicidad en su organismo es magnífica. Tiene una grasa anatómica que puede absorber las toxinas sin que enferme. Por estos motivos, esta tortuga no es comestible para los humanos.

Ubicación geográfica y hábitat

Ubicación de la tortuga Carey

Las tortugas carey habitan las zonas más tropicales. Suelen nadar siempre cerca de la superficie. Rara vez nada debajo de los 20 metros de profundidad. Generalmente, nadan cerca de los arrecifes de coral, las lagunas ribereñas poco profundas y las zonas más rocosas. También se las ha visto en algunas bahías y estuarios de manglares.
Su área de distribución se encuentra en la zona circuntropical. Esto es todos los océanos y mares asociados entre la latitud 30º N y 30º S. En el único mar que no están es el mediterráneo. En su mayoría, están por la parte norte del caribe.

Comportamiento de la Tortuga Carey

Carey recién nacida abandonando el nido en Puerto Rico.
Poco se sabe sobre los primeros años de vida de las crías: tras alcanzar el mar, se cree que inician una etapa de vida pelágica (como otras tortugas marinas), durante un periodo de tiempo indeterminado. Aunque se desconoce su tasa de crecimiento, cuando los ejemplares jóvenes alcanzan cerca de 35 cm, pasan de un estilo de vida pelágico a uno asociado a los arrecifes de coral. Alcanzan la madurez sexual entre los 20 y los 40 años de edad.​

Se estima que pueden vivir entre 30 y 50 años, aunque, debido a la falta de datos, no se sabe con exactitud la edad que pueden alcanzar en estado salvaje.​ Como otras tortugas marinas, las carey son solitarias durante la mayor parte de su vida; sólo se agrupan durante la época de apareamiento. Con anterioridad se las consideraba sedentarias, pero actualmente se sabe que son de marcado carácter migratorio.​ Debido a la dureza de sus caparazones, no tienen grandes predadores y existen pocas criaturas que sean capaces de morder a través de su concha protectora. Los tiburones y los cocodrilos marinos son algunos de sus depredadores naturales. También se tiene conocimiento de que algunas especies de pulpos y de peces pelágicos se alimentan de tortugas adultas.

Reproducción

Tienen unos intervalos de anidación de entre dos y cuatro años, aunque este periodo puede variar de nueve meses a diez años, según la zona; utilizan preferentemente lagunas aisladas de islas remotas a lo largo de toda su área de distribución. La época de apareamiento de la carey atlántica transcurre normalmente entre abril y noviembre. Para las poblaciones del océano Índico, como las de las Seychelles, ésta discurre entre septiembre y febrero.​ De igual forma que sucede con otras tortugas marinas, las carey se aparean en lagunas poco profundas cerca de las playas donde probablemente nidificarán. Tras el acoplamiento, las hembras arrastran sus pesados cuerpos hasta la playa durante la noche. Entonces se encargan de limpiar una zona y cavar un agujero donde depositarán sus huevos, usando sus aletas traseras. Después la hembra efectúa la puesta en el nido y cubre de inmediato los huevos con arena. Los nidos de E.

Imbricata del Caribe y de Florida generalmente contienen unos 140 huevos, aunque pueden llegar a 250,​ sin embargo, las nidadas notificadas en el golfo Pérsico son sensiblemente inferiores, con un promedio de unos 90 huevos.​ Tras el prolongado proceso, de varias horas de duración, la hembra vuelve al mar. La puesta es el único momento en que las tortugas carey abandonan el mar.

Cuando son bebés


La tortugas recién nacidas, que generalmente pesan menos de 24 gramos, abandonan el nido durante la noche después de aproximadamente dos meses. Estos recién nacidos presentan colores oscuros y el caparazón, en forma de corazón, mide aproximadamente 2,5 centímetros de longitud. De forma instintiva se dirigen al mar, atraídos por el reflejo de la Luna sobre el agua (un proceso que puede ser perturbado por fuentes de luz antropogénicas). Las crías que no alcancen el agua antes del amanecer probablemente terminen siendo alimento de diversos predadores, como cangrejos y aves limícolas.


La carey se cruza fácilmente con otras tortugas marinas, como las tortugas bobas (Caretta caretta). Ciertos híbridos encontrados en Brasil o en Florida fueron viables y fértiles porque existían por lo menos desde dos generaciones.​ Se descubrió también un híbrido de tortuga verde (Chelonia mydas) en Surinam.

Crías de tortugas Carey

Taxonomía y clasificación

Reino: Animalia
Filo: Chordata
Clase: Reptilia
Orden: Testudines
Familia: Cheloniidae
Género: Eretmochelys
Fitzinger, 1843
Especie: E. imbricata
(Linnaeus, 1766)